A Képler Laverán Lima Ferreira, más conocido como Pepe, le llegará el tiempo de revancha, cuando integre, esta vez como titular, la plantilla del Real Madrid el 28 de mayo en Milán. Y el desquite tiene que ver con aquel partido en tiempos de Ancellotti en que tuvo que ver la final de Lisboa desde la tribuna a causa de una lesión de la que no se recuperó a tiempo.
Cuando llega el tiempo de revancha hay que aprovecharlo
Como dice Diego Simeone, el técnico de su rival de Champions: “el fútbol siempre te da otra oportunidad”. Es un tiempo que espera el Atlético de Madrid después de caer en Lisboa. Paradójicamente el tiempo de revancha ha llegado para Pepe. El 28 de mayo también tendrá un círculo remarcado en su calendario porque esta vez estará en condiciones de jugar.
En aquel partido bajo la conducción de Ancelotti, el luso quedó fuera del equipo por una lesión y en su lugar entró Varane, que por cierto tuvo un partido sensacional. Y después de dos años, a los 33, siente el aliento de Varane en la nuca y sabe que Ramos se ha afianzado como capitán del Madrid, de modo que el banquillo es casi un destino.
Pero Pepe se ganó un lugar en el once titular con Zidane en la segunda parte de la temporada, sepultando el tiempo de Rafa Benítez donde era el tercer central. Pepe hoy tiene un estado físico óptimo, superó lesiones y se encaramó como indiscutido en el tramo final de la temporada para convencer a Zizou, que cree en su experiencia para este tipo de compromisos.
El portugués tuvo una lesión muscular el arrancar la temporada y cuando superó el contratiempo, entró en el once titular por las bajas de los otros centrales. Las ausencias de Ramos y de Varane por sendas lesiones, le permitieron jugar 12 partidos consecutivos. En febrero último, tuvo que parar para recuperarse de unas molestias en la planta del pie que derivaron en una fascitis, pero hoy está al 100%.
En Liga, el buen desempeño de los centrales resultó clave para ganar 12 partidos. Durante este lapso, la pareja de centrales fue alternando más que en la Champions: por ejemplo Pepe y Ramos, coincidieron sólo en cuatro encuentros, Pepe y Varane en tres, y Varane con Ramos en otros tres. Nacho jugó los otros dos partidos, una con el luso y otra con el galo.
Llegó el tiempo de revancha y difícilmente Pepe deje pasar la oportunidad.