Un poco de alivio por el BREXIT

El Real Madrid considera que no habrá problemas con el Brexit  y que la situación de Gareth Bale no tendrá modificaciones en el corto plazo.

Entender los alcances presentes del Brexit

Ayer corrieron como reguero de pólvora las especulaciones sobre las implicancias del Brexit en el fichaje de jugadores británicos dentro del mercado europeo (Ver nota en MADRID HOY). Esto claramente incluye a Gareth Bale y el peligro radica en que el extremo podría pasar a ser extracomunitario, con el evidente perjuicio para el merengue, que ya cuenta con tres jugadores con estas características – James, Casemiro y Danilo -, que es el máximo permitids.

Pero la realidad es que, una vez decantados los primeros momentos de sorpresa, se sabe que los plazos que consumirá la salida del Reino Unido de la Unión Europea, requerirá de que Londres inicie los trámites lo antes posible, y aun así se calcula que los mismos implicarán un mínimo de dos años para que terminen de concretarse.

Todo está muy fresco todavía y hay que mantener la calma, porque hoy no se descarta que la salida se prolongue hasta por siete años, por lo que cualquier especulación, de cualquier club, no demandaría ninguna acción fulminante o apresurada. Entre dos y siete años habrá tiempo más que suficiente para resolver lo de Bale y lo de cualquiera de sus otros tres extracomunitarios.

Hay otro aspecto que podría favorecer que los jugadores británicos jueguen en Europa sin perjuicio para sus intereses. Nada quita que el Reino Unido negocie con Bruselas para que los futbolistas de su nacionalidad no sean calificados como extranjeros en países de la Unión Europea. Esto es algo que ya sucede con países como Noruega, Islandia, Turquía o Suiza.

El leading case es el noruego Martin Odegaard que juega en el club blanco como comunitario a pesar de no ser europeo, cumpliendo la normativa, y es el mejor ejemplo para echar paños fríos a las preocupaciones del madridismo. Ya pasó el primer sofocón con el ‘Brexit‘ y el Real Madrid confía en que ni a medio, ni a largo plazo, termine siendo un problema capaz de condicionar su proyecto  deportivo.