Madrid Hoy

Pepe jugará el domingo

Gran noticia para la afición de Portugal, y particularmente para el madridismo, porque Pepe ha vuelto al trabajo a la par del resto de sus compañeros del seleccionado luso, y estará disponible para la final de la Eurocopa. Como es previsible, apunta a ser titular ante Francia luego de haberse perdido el duelo del pasado miércoles frente a Gales.

La esperanza de Pepe para la final

Képler Laverán Lima Ferreira, más conocido como Pepe, trabajó a la par del grupo en la última sesión antes del partido y todo indica que será titular en el encuentro definitorio ante el Seleccionado de Francia.

El central se puso a total disposición de Fernando Santos y trabajó con normalidad, de manera que, salvo algún imponderable de última hora, será titular en la final de la Eurocopa. El zaguero se había perdido la semifinal ante Gales, pero se ha esforzado para llegar al encuentro final porque no se lo perdería por nada del mundo y, si su muslo no le juega una mala pasada de última hora, estará listo para ingresar en la plantilla titular.

En el encuentro de cuartos de final ante el Seleccionado de Polonia, el marcador central del Real Madrid terminó con molestias musculares en el muslo. El entrenador del combinado luso Fernando Santos decidió no ponerlo en riesgo en semifinales, y aunque a priori parecía imposible  que Pepe llegara a la final, su presencia en el último entrenamiento previo a ésta, lleva a pensar que el asunto está resuelto, aunque el 100% físico ideal sea una utopía.

Después de una semana sin entrenar, finalmente Pepe ha vuelto al grupo este sábado y pudo mostrar que será difícil dejarlo fuera de los once integrantes del equipo titular.

Fernando Santos lo exigió con reservas en el último entrenamiento que se llevó a cabo en el centro nacional francés de rugbi de Marcoussis, con los 23 futbolistas convocados para la Eurocopa. Para el seleccionador de Portugal, Pepe es como “un líder, la extensión del entrenador en el campo”. Al mariscal del Real Madrid habría que matarlo para que se pierda una de las citas más importantes de la historia del fútbol luso.