En el Real Madrid no se ponen nerviosos tras la marcha de André Gomes al Barcelona. Todo lo contrario. Calma absoluta en la concentración de Montreal, donde Florentino Pérez, José Ángel Sánchez y Zinedine Zidane hablan a diario y de manera fluida sobre la confección de la plantilla.
No es ningún secreto que André Gomes estuvo muy cerca del Real Madrid, pero eso fue hace una semana, no el pasado jueves, cuando el Barça hizo oficial su fichaje. Ese día, el club blanco ya había paralizado las conversaciones con el Valencia ante las dudas que surgieron en el cuerpo técnico y la junta directiva en relación a la contratación del futbolista. A Zizou le gustaba André Gomes, pero no terminaba de encajarle en el once. Y pagar casi 50 millones por un jugador que no iba a ser indiscutible se antojaba impensable para el presidente del Real Madrid.
Más aún cuandoJames Rodríguezcambia de opinión y decide quedarse, yéndose al limbo una estratosférica oferta por el colombiano de 85 millones de euros. Es probable que PSG y los grandes de la Premier vuelvan a por él, pero mientras, sin salidas importantes, no hay fichaje galáctico. No por falta de dinero, que el Madrid lo tiene, sino por no provocar un overbooking en la zona de creación: Casemiro, Kroos, Modric, Kovacic, Isco, James… no entran todos. El no fichaje de André Gomes, al que el Madrid renunció, no quiere decir que el club blanco esté parado.
Pogba quiere jugar en el Madrid. Zidane quiere a Pogba. El club duda, y más cuando mira el precio en su etiqueta: 120 millones de euros.
Nada de eso. La maquinaria blanca sigue en marcha y un nombre sigue sonando más fuerte que los demás: Paul Pogba. Con André Gomes a la vuelta de la esquina parecía un capítulo cerrado, pero ahora vuelve a estar abierto. Como con André, habría que hacer sitio en la plantilla, pero llegado el momento, si Pogba, como André, no se pone nervioso y sigue en la Juve, puede ser el hombre.Pogba suena en el Bernabéu sobre todo por Zidane, que es el que lo tiene entre ceja y ceja. Lo quiere a toda costa. Y en este sentido, hay debate en el Madrid, porque el mediocentro de la Juventus no termina de enamorar en la zona noble. Tampoco su representante, Mino Raiola, que este verano, al menos, ha lanzado más de un guiño al equipo blanco. Pogba quiere jugar en el Madrid. Zidane quiere a Pogba. El club duda, y más cuando mira el precio en su etiqueta: 120 millones de euros.