Conexión dentro y fuera de la cancha

Luka Modric y Sergio Ramos, protagonistas principales del empate del sábado ante el Barcelona, tienen una especial conexión dentro y fuera de la cancha.

Unidos por una conexión muy especial

En la última pelota ante el Barça en el Camp Nou, Modric y Ramos hicieron gala de sus cualidades para darle el empate el Madrid. Y es que se conocen a la perfección por una conexión muy fuerte dentro y fuera de la cancha.

Muestra clara de ello es la imitación que el capitán blanco hace del croata en el vestuario para que todos lloren de risa. Los más cercanos dicen que no se sabe quién de los dos está hablando realmente.

Lo cierto es que es un momento de diversión para todos, incluso para Modric, quien larga más de una carcajada con el número de Ramos. Y es que el croata es un hombre muy querido dentro del plantel y se ha ganado el cariño del capitán merengue.

Un tándem que le ha dado al Madrid dos de las más grandes alegrías de los últimos años. Y este sábado volvió a repetirse, con un cabezazo salvador de Ramos tras centro de Modric sobre el final, para llevarse un empate del Camp Nou.

“Lukita y yo nos entendemos con mirarnos”, afirmó Ramos. Y así fue en la jugada final del clásico. Modric se paró frente el balón buscando a su amigo dentro del área.

Y el rubio no falló. Apuntó a la cabeza del defensor y éste cabeceó aun mejor. “Por fin pusiste una buena”, cuentan que bromeó Ramos en el vestuario. Dentro del campo se juntaron para abrazarse y festejar tras el pitazo final de Clos.

Una amistad de la que saca provecho el Madrid. Son más que amigos, Modric y Ramos son casi hermanos. Salen a comer con sus familias y hasta planean las vacaciones juntos.

Y eso que no empezaron bien. En los primeros meses de Modric en el Madrid había algo que no le gustaba de Ramos. Pero fue y se lo dijo a la cara. Una decisión acertada que llenó la relación de respeto y creó una gran amistad.