Garantía Keylor

Keylor Navas mantuvo su valla en cero. Con una sólida actuación entregó lo de siempre, seguridad, tranquilidad, con las manos, los pies y en particular, con la cabeza.

Cuando Cero es más

Ya ocurrió en 20 oportunidades durante esta temporada, algo que no es habitual ni fácil de concretar. En tiempos de Iker Casillas en la temporada 10-11, se obtuvo el record de 27 partidos sin recibir goles. Si el costarricense mantiene su performance, podría llegar a 24.

Navas ayer no fue muy exigido. Salvo en los instantes finales, con pelota parada, La Real no inquietó y le dio poco trabajo, pero cuando lo llamaron, mostró una seguridad apabullante, siempre respondiendo cuando se apretaba a la defensa del Madrid. Se lo vio responder con una buena estirada en un cabezaso de Zurutuza en lo que fue la acción más peligrosa del equipo txuri-urdin (tal el apodo de los aficionados del equipo vasco). Navas no dio rebote, pero corría el minuto  91 y los aficionados madridistas, presentes en cancha o en la tele, se quedaron pálidos observando al realista cabecear el remate de Illarra. Para respiro de todos, incluyendo a Zidane que se dio vuelta al banco con los ojos desorbitados, el portero atrapó el balón y cerró su actuación mientras moría el partido.

Keylor es imprescindible en esta formación y en sus reflejos y seguridad radica buena parte de las aspiraciones del Real Madrid para vencer al Manchester City el próximo miércoles. El arco en cero no solo es una ventaja, sino una necesidad y un símbolo que leen los rivales.

Otra noche en cero asegura los penaltis. Y en la Champiosn el tico fue imbatible en 10 de los 11 partidos que ha disputado. “Esperemos que siga la racha”, dijo el portero cuando entraba al túnel de vestuarios del Etihad Stadium.

La defensa ayer con Danilo, Ramos, Varane y Nacho, no desentonó frente a un rival que por táctica sólo ofreció un contrataque liviano y oportunista. No obstante, quienes lo acompañarán el próximo miércoles serán Carvajal, Pepe y Marcelo. Sólo Ramos se mantendrá en el once titular, que sabe que para llegar a la final, no sólo hay que marcar goles, sino intentar mantener la valla propia en cero.